Contacto

Contacto : espaciocartaabiertabariloche@gmail.com

miércoles, 28 de enero de 2015

CIENCIA Y TECNOLOGÍA PARA LA ARGENTINA HOY




Reflexiones de nuestro compañero Luis Conde.

Luis Fernando Conde Bidabehere es autor del libro
"Agua pesada - un proyecto original en la Patagonia Argentina".
Historia del diseño, montaje y puesta en marcha de la Planta Industrial de Agua Pesada en Arroyito, Provincia del Neuquén, 1980-1994.





CIENCIA Y TECNOLOGÍA PARA LA ARGENTINA HOY

Hoy ya nadie duda que para el desarrollo integral de un país tanto en su aspecto económico como social, resulta indispensable poseer una fuerte estructura en cuanto a investigación y desarrollo en lo que a ciencia y tecnología se refiere. Dicho desarrollo institucional ha tenido muchos vaivenes en nuestro país a lo largo de su historia, que la ha llevado a ser un país dependiente también en este campo, tanto en el contexto regional como así también en el internacional. Atada en su trayectoria obviamente a los acontecimientos políticos y económicos de cada época histórica del país, dando como resultado el no haber obtenido un desarrollo sostenido y sustentable en el campo de la ciencia y tecnología. Sin un desarrollo autónomo no es posible tener un desarrollo consistente, a pesar de esto sin embargo podemos rescatar algunos logros excepcionales de algunas instituciones como son la CNEA, el INTI e INTA, sin olvidarnos de los tres premios Nobel que obtuvo nuestro país en ciencia aplicada.

Para poder lograr esta consistencia debería existir un proyecto político-económico que apoye y planifique fuertemente su desarrollo a largo plazo.

Ahora se puede observar objetivamente que existe dicho apoyo por parte del gobierno nacional, el cual resulta comparativamente un logro inédito, sobre todo a partir de la creación del Ministerio de Ciencia y Tecnología en el 2007. Esto se puede ver en algunos logros notables como por ejemplo el diseño y aplicación del Plan Nuclear argentino mediante la ley 26566 que trajo como consecuencia inmediata la terminación y puesta en marcha de la central nucleoeléctrica de Atucha II después de 10 años de estar parado este proyecto. Lo mismo podemos decir de la terminación de la planta de uranio enriquecido de Pilcaniyeu, y el comienzo del primer reactor de potencia de diseño nacional llamado CAREM. A esto se agregaría el comienzo de la cuarta central Atucha III asociados en este caso con la comisión atómica del gobierno chino. Otros logros en esta época serian la construcción de 18 radares para nuestros aeropuertos como asi también de la construcción del primer satélite de comunicaciones el ARSAT I en las instalaciones que tiene el INVAP en Bariloche.

La ciencia dicen que es universal y neutra, pero vemos que cada país debe hacer uso de ella de acuerdo con sus intereses y necesidades estratégicas, y sino observemos que es lo que hacen las potencias centrales en sus respectivos desarrollos y orientaciones. Entonces nosotros deberíamos tener un desarrollo local con personal e instituciones altamente calificados salidos de nuestras universidades e institutos científico-tecnológicos, cuyos egresados salgan con una actitud emprendedora, como es el caso de los que se gradúan en el Instituto Balseiro, que por cierto ha recibido un apoyo extraordinario del estado nacional en los últimos años.

Por todo esto la creación del Ministerio de Ciencia y Tecnología, en el 2007 es una institución clave para la promoción de la ciencia y la tecnología como así también la planificación y detección del derrotero que necesita el desarrollo integral de nuestro país. Hasta el momento la gestión de este ministerio ha obtenido algunos logros dignos de destacar:
  • ·  Investigación y desarrollo de una vacuna contra el cáncer de pulmón 
  • · Se repatriaron 1.130 científicos a través del programa Raíces 
  • · Se lograron 160 acuerdos intergubernamentales e interinstitucionales 
  • · La ejecución de 1.137 proyectos de investigación conjunta en un marco de 70 países 
  • · 150 mil metros cuadrados de construcciones en todo el país 
  • · Promoción de la fabricación de medicamentos que antes se importaban
Todo este desarrollo nacional en la ciencia y tecnología abre las puertas del camino hacia una soberanía tecnológica que nunca va a llegar al 100 %, como tampoco lo lograran las potencias centrales, pero tener un buen porcentaje si es conveniente en un camino que no será fácil recorrer pero que vale la pena emprender en aras de un desarrollo autónomo y con justicia social, sin depender de los vaivenes de los intereses foráneos que pocas veces coincidirán con los nuestros.

En la batalla cultural que habla nuestra presidenta debemos incluir también una difusión amplia hacia nuestra gente de todo este desarrollo científico tecnológico y terminar con ese paradigma, diría neocolonial que “lo de afuera es mejor”, mensaje subliminal de la dependencia y la desvalorización del intento de un mejor futuro para nuestro país.

Luis Fernando Conde 
23/01/15




No hay comentarios:

Publicar un comentario